Si hiciera un listado de las obras cinematográficas que me enamoraron de chica y me hicieron soñar con convertirme en una diseñadora de vestuario, definitivamente West Side Story estaría en el top 10.

La manera más simple de definir esta adaptación de Romeo y Julieta magistralmente musicalizado es: una fantasía romántica llena de personajes muy bien definidos con una fuerte estética, muy acorde a su época.

Hace algunos años, cuando supimos que el genio de Steven Spielberg haría una versión de la película muchos teníamos la curiosidad de que manera iba a reaccionar el vestuario bajo su batuta. No decepciono. El diseño de vestuario estuvo a cargo del ganador del Premio Tony, Paul Tazewell.

El trabajo de Tazewell para la película tuvo como eje la autenticidad y la comunidad, desentrañando la personalidad de ambos grupos principales siendo fiel incluso a la esencia de cada uno de los personajes. Con la gran ventaja de que esta versión (al fin) corrige un error de la película original de 1961, esta vez SÍ se eligieron a actores latinos para interpretar a personajes latinos.

La gran experiencia de Tazewell en el teatro definitivamente ayudó. Tazewell creció en Ohio y estudió diseño de vestuario en La Escuela de Artes de Carolina del Norte y en aclamada Escuela de Artes Tish en Nueva York, pasó la mayor parte de la década de 1990 trabajando para un teatro en Washington, DC donde perfeccionó su oficio. Ahí fue descubierto por George C. Wolfe quien lo reclutó para el musical ganador del Tony “Bring in ’da Noise, Bring in ’da Funk“. Como consecuencia, empezó a rondar las tablas de diseño de grandes obras como Hamilton, In the Heigths y The Color Purple. Y fue precisamente su trabajo en “Hamilton” lo que atrajo la atención de Spielberg.

Sketch de vestuario de Maria, interpretada por Rachel Zegler. Sketch de Miodrag Guberinic

Aunque Tazewell ya había incursionado en el cine (Lackawanna Blues de Spike Lee, entre otras), diseñar para un espectáculo cinematográfico musical es un gran desafío: “Con un musical como West Side Story hay tanta coreografía, por lo que la ropa debe funcionar de una manera muy específica”, explica Tazewell. “Hicimos todo a medida, porque todos los vestuarios debían bailarse y había que elegir telas que se movieran o estiraran de una manera específica”.

Paloma Garcia-Lee como Graziella, Mike Faist como Riff, David Alvarez como Bernardo y Ariana DeBose como Anita.
Foto: Niko Tavernise

En una entrevista para Bazaar.com comenta: “Mi investigación se centró en observar imágenes y fotografías, específicamente las fotografías de Bruce Davidson, en su mayoría instantáneas en blanco y negro de las pandillas de Nueva York en las que se infiltró en la década de 1950. Tuve la oportunidad de ver cómo era la ropa, y realmente estudiar cómo eran esas piezas y cómo sentaban, y por qué eran atractivas estilísticamente hablando. También miré catálogos de época, como Sears, Spiegel’s o Montgomery Ward”.

“Como soy una persona moderna, la película siempre se iba a ver a través de la lente de una persona moderna e iba a reflejar cómo me influyeron estas fotografías. Si realmente analizas la producción original y lo que llevaban, era un vestuario moderno visto a través de la visión del diseñador que estaba diseñando esa producción (Irene Sharaff). Creo que hicimos un buen trabajo recreando eso”.

“Quería ser respetuoso con la comunidad latina migrante y cómo estaban trabajando para encajar en ese momento” comparte Tazewell.

Si analizamos a detalle el vestuario de la banda puertorriqueña Sharks notamos que tienen un estilo más formal, porque es aspiracional. Se visten para respetarse a sí mismos y por consiguiente lograr respeto de otras personas; ademas de que están trabajados en una paleta de color cálida. Esto se traslada también a la comunidad afroamericana con zapatos lustrosos y camisas perfectamente planchadas. En contraste con los Jets; nos cuenta la historia que vienen de hogares rotos y están en una lucha social por defender su lugar dentro de la comunidad. Los Jets es la única banda que lleva vaqueros azules: el gran icono de Estados Unidos.

Diseño de vestuario de Tony, protagonizado por Ansel Elgort. Scketck por Shane Ballard.

Una de las decisiones creativas más importantes; sí tuviste la oportunidad de verla en la pantalla grande, seguramente confirmaras el impacto que esta decisión tuvo en su conjunto: El vestido de Anita cuando interpreta “America”.

Tazewell comenta que fue un reto, ya que adora el vestido lavanda de la película original que llevó Rita Moreno. Sin embargo, en la versión de Spielberg está en una posición diferente cuando se reproduce la canción. Ahora el vestido se usa durante el día como parte de un recorrido por la ciudad. Tienes a los Sharks siguiéndolos y es un momento clave en el que el espectador puede descubrir el amor que hay entre el personaje de Bernardo y Anita. Tazewell buscaba proyectar a Anita como el sol; como el centro de esa comunidad y que mostrara energía y exuberancia que refleja el resto del vecindario.

Foto: Niko Tavernise.
Foto: Niko Tavernise.

Además de pensar en como se vería cientos de vestuarios durante las complejas secuencias de la película, Tazewell se aseguró de tener en mente los momentos tranquilos y centrados en los personajes principales como María y Tony que empezarían a cantar y bailar pero al mismo tiempo deben contar con elementos que les permita interpretar arcos emocionales.

Rachel Zegler como Maria. Foto: Niko Tavernise.




La nueva María (Rachel Zegler) es una figura muy delicada, al igual que la interpretada por Natalie Wood; es una joven que vine de Puerto Rico, en busca de sí misma y experimentando la madurez en este nuevo entorno. El vestido blanco es un guiño al típico vestido de confirmación y además algo que su familia ha decidido apropiado para ella.

Añadir el cinturón es una decisión de que se presenta como un acto de complicidad y madurez. Uno de mis momentos favoritos.

Tazewell comenta que diseño para crear una narrativa tácita que ofrece pistas a la audiencia de manera sutil y otras muy audaz de los personajes, buscando que éstos sean auténticos.

Espera que toquen el corazón de la gente y sean recordadas sus decisiones.

Esto hace que esta audaz reinvención de West Side Story sea un emocionante viaje de moda para recordar.

Yo, definitivamente la recordaré…